lunes

¿Defensa Nacional o el Orden Interno?


Uno de los objetivos de la reunión "informal" del presidente Humala con el mandatario francés, Francois Hollande, sería la adquisición de un satélite de $200 millones para encarar conflictos externos, aunque, según los expertos, el arrendamiento satelital es la mejor alternativa respecto a la compra, debido a la rápida obsolescencia tecnológica.

La decisión de adquirir tecnología y armamento se confirmaría entonces con la compra de material bélico por $2300 millones que las Fuerzas Armadas efectuarán de aquí a diciembre, pues en enero del próximo año, la agencia de compras, creada mediante el Decreto Legislativo 1128, será la encargada de renovar el parque militar.

De otro lado, el Perú implementó con éxito hace quince años una política de resolución de conflictos limítrofes, el último de los cuales quedará finiquitado con el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya. En ese contexto, y sin negar la importancia de la Defensa Nacional, nuestra mayor prioridad debería ser el orden interno y la seguridad ciudadana.

Al respecto, los mapas temáticos de evolución de delito, publicados por el observatorio de la Criminalidad del Ministerio Público, a través de tasas de medición altas, medias y bajas por cada 100,000 habitantes, revelan, por ejemplo, que el delito de Trata de Personas se incrementó de 2.0 el año 2010 a .27.4 el 2012. Respecto a los delitos ambientales, la data del MP indica que el año 2010 Madre de Dios mostraba una tasa delictiva alta de 43.1 mientras que en el resto del país, la tasa delictiva era baja (entre 0.3 y 21.7). Para el año 2012, Madre de Dios no solo había incrementado su tasa delictiva alta en 527.3 por habitante, también le acompañaban en esta calificación Ucayali (64.4), San Martín (51.3) y El Santa (48.8).

Asimismo, el último reporte del INEI sobre la Seguridad Ciudadana, difundido el 30 de setiembre, revela que entre febrero y julio de 2013 el 40.4 por ciento de la población de 15 y más años, de las principales ciudades, había sido víctima de algún hecho delictivo. En ese mismo período, la tasa de hechos delictivos por cada 100 habitantes, muestra que el robo (25.2); estafa (14.0); robo de vehículo (4.3); amenazas e intimidaciones (3.8); maltrato sexual (2.2); robo de negocio (1.0); secuestro y extorsión (0.4); entre otros, son los que más afectan a la población. El presidente Humala al iniciar su gobierno ofreció combatir la inseguridad ciudadana, sin embargo, la victimización por hogares se incrementó en 42.2% el año 2011; y en 43.2 % el año 2012, mientras el año 2010 era 29%.

La situación descrita se agrava, debido que el Perú se ha convertido en el principal exportador mundial de cocaína, como resultado de la aplicación del Plan Colombia, que genera el llamado efecto 'globo', mediante el cual traslada a nuestro país la producción ilegal (incremento de cultivos en la triple frontera amazónica), lo que genera el aumento de la violencia y corrupción.

Incluso, frente el terrorismo, hay datos preocupantes. La encuesta de Ipsos, de setiembre de 2012, señala que 9% de peruanos consideró que los seguidores de Guzmán deberían participar en elecciones; un 19% que pueden manifestarse públicamente a favor de la lucha armada; y el 18 de agosto de 2013, un 8%, que los extintos Alipio y Gabriel eran luchadores sociales.

No basta una legislación punitiva para enfrentar estos flagelos, se necesita mayores presupuestos institucionales y concertación política.